El
estremecido ulular
del viento
en mi solana
excita mis
recuerdos,
aviva los
rescoldos
de un
fuego que murió.
¡Qué
hermoso es el invierno
al calor
de la lumbre!
Bajo la
techumbre,
el
crepitar de leños
de robles
o de tejos,
aromando
la estancia.
En mi recuerdo
habita
la marcha
de las tropas.
Por el
desfiladero avanzan
en largas
caravanas.
El ritmo
de los hombres
volvía a enardecer
el sonar
de tambores
que
marcaban el paso
para
enfrentar la muerte.
Enfebrecida
tropa
que
cabalga tranquila
o ya
galopa porque
el
instante vivido
es lo que
cuenta.
La vida de
un guerrero
vale poco
o nada vale
porque el
alma del hombre
ha sido
siempre el precio
que el
poderoso paga sin aprecio.
Para enardecer al pueblo
se invocan
Libertad y Patria.
De este
modo los hombres
han
avanzado siempre
camino de
la gloria.
Aterrados, confusos
y odiando
para seguir viviendo
sin
comprender
por qué
han de matar
a otros
inocentes
que son
igual que ellos
pues sólo
en la batalla se disputan
la vida
que perder.
Alcalá de Henares, 7 de noviembre de 2018
Texto e imágenes realizados por Franziska
JUEGO DE LA PALABRA DADA
PALABRA: ENARDECER
DADOR:
DAVID BAZO GAZAN
Se publicó por primera vez en
Alcalá de Henares, 30 de marzo de 2012
Raitán, las franziskitadas