jueves, 28 de abril de 2022

MI QUERIDO ÁRBOL SOLITARIO

 


Mi querido árbol solitario,

siempre que el viento te balancea

se oye, al unísono, el bisbiseo

inquietante de  crespones y sedas.

 


Eres una imagen fija en medio del camino

como un reflejo dormido en el recuerdo:

eres, tal vez,  la evocación de un sueño

perdido en la memoria del pasado.

 


Sobre tus ramas se han deslizado,

a millares, las gotas de lluvia

y también algunos rayos

te han hecho temblar

en noches ebrias de luz y de misterio.

 




Azotado fuiste por el aquilón y el cierzo

en los gélidos inviernos del ayer.

También la brisa ha besado

 tus ardientes  hojas

en las cálidas noches del verano.

 


Impasible has visto pasar el tiempo.

Frágil  es la sombra que ahora ofreces.

Tus hojas secas son canto de tus sienes.

Sin notarlo, has ido acumulando días, meses y años.

 


Un añoso ejemplar llegando al límite:

un árbol centenario, eres.

Sin embargo tu corazón aún presta asilo al canto

y a los nidos de alondras y vencejos.

 

 


Ahora no temes al viento huracanado.

Eres humilde y consecuente y es por eso

que nunca alardeas de cuántas primaveras

has vuelto a renacer llenándote de flores y de frutos.

           


Cada noche, sonríes con cariño a las estrellas

porque estás vivo y una savia eficaz y laboriosa

sostiene todavía tu tronco y sus raíces.

Que tu fin está cerca, lo presientes.

 


Me parece, querido árbol, que tú has sabido

aceptar la soledad en grata compañía.

Has querido retoñar y darte en cada rama

con el mismo aroma y alegría

 


que florecen las matas del romero

y deslumbran las flores del cantueso.

 


No sé por cuanto tiempo

tus raíces hundidas en la tierra,

resistirán el paso del polvo del destierro.

 


Por eso, quiero que hoy sepas

que si  me alejo y tú te quedas,

no voy a enterrar tu tronco en el olvido

porque pensar  en ti, evocarte,

 


es como cumplir los ciclos naturales.

Volver de nuevo a tener alas.

Ser, a la vez, estrella, viento y paraíso.

 

 


Alcalá de Henares, 28 de abril de 2022

TEXTO Y FOTOGRAFÍAS REALIZADOS POR FRANZISKA

 

ESCRITO para el “Club de las letras mágicas”

Tema:  una carta dirigida a un árbol. Fecha 6/01/2014

Propuesto por Julia Enciso

 

 

18 comentarios:

VENTANA DE FOTO dijo...

Ese árbol solitario, también habrá dado sombra en el verano y de ella se habrá beneficiado algún caminante que ha descansado a los pies de su tronco. También ha podido albergar algún nido de pájaros, que entre sus ramas han visto la seguridad para sus crías.

Cuantos beneficios proporciona un simple árbol y que el ser humano, se empeña en no reconocer.

Besos

Ester dijo...

Un canto al árbol que tanto nos da, hasta papel para que le escribas cosas bonitas. Un abrazo

Mª Jesús Muñoz dijo...

"Eres, tal vez, la evocación de un sueño, perdido en la memoria del pasado"
Franziska, he leído tu poema un par de veces y puede que lo haga otra vez...Esa evocación vuelve a ti desde siglos atrás... Quizá te lo han inspirado las musas, algún labrador, pastor o caminante, que se detuvo debajo del "árbol centenario" a descansar bajo su sombra y le dedicó sus bellos pensamientos, que ahora te han llegado a ti. ¿Por qué no? Lo cierto es que le dedicas un canto de admiración y gratitud, que nos llega, sintiendo su sincronía contigo. Los árboles tienen su propia alma, nos ven, nos sienten. Tienen su paciencia, su calma para aguantar las estaciones. También su generosidad y entrega, como bien dices, dando sus frutos, sus ramas a los pájaros. Por tanto, la naturaleza entera sonríe en tus letras, porque le diste voz y alma, amiga. Realmente bello e inspirador.
No exagero es un buen poema y además las fotos que lo acompañan son un encanto. Gracias por ello.
Mi abrazo entrañable y admirado, amiga.

Mónica dijo...

Estimada Franzisca. Buenos días.
Este árbol solitario te da sombra y en fresco de veranos calurosos. El canto de tu poema suministra calma y respiración. Con un pensamiento positivo puesto en cada ciclo natural. Diferente color y aromas.
Un abrazo con cariño.
Feliz viernes, guapa.

Roselia Bezerra dijo...

Bom dia de paz, querida amiga Franziska!
Que delicadeza para com nossas amigas árvores!
Elas passam pelas Estações sem reclamarem de calor ou frio. Ressecam-se em silêncio.
O exercício de dar vida aos seres é bárbaro!
Gostava de fazer algo do estilo no colégio e a internet nos favorece com algo assim para vivificar ainda mais o mundo.
Imagens lindas e parabéns!
Tenha dias abençoados com paz!
😘🕊️💙

Elda dijo...

Maravillosa carta a ese árbol. Unas palabras suavemente preciosas vas ofreciéndole con mucho encanto y muy poético.
Me ha encantado, muy bello Franzisca.
Un abrazo y feliz fin de semana.

lanochedemedianoche dijo...

Una bella oración a tu bello árbol, lo escribes con amor, se nota la sencillez de tus letras amorosas. abrazo

Laura. M dijo...


Preciosas palabra le dedicas a este árbol generoso que cada año se renueva dando nueva vida. No dudes que sus raices hundidas en la tierra seguiran ahí mucho tiempo más
Buen fin de semana Franziska.
Un abrazo.

Maria Rodrigues dijo...

Belíssimas palavras em plena sintonia com maravilhosas imagens. Um canto sublime às árvores que tanto nos dão.
Beijinhos

Graça Pires dijo...

Que bonito canto para uma árvore! Será solitária? E as pessoas que descansam na sua sombra? E as aves que saltitam nos seus ramos? E os insectos que as visitam? E tudo o mais que a sua disponibilidade consente?
As flores que aqui nos oferece são lindíssimas!
Uma boa semana com muita saúde.
Um beijo.

Fá menor dijo...

Uma carta muito bela! Poder falar com uma árvore, com a Natureza, é um privilégio e um dom .

Beijos.

Marta Vinhais dijo...

As árvores são mágicas...Morrem e renascem... Perfumam o ar, dançam com o vento...Deixam abraçar-se...
Belo....
Obrigada pela visita
Beijos e abraços
Marta

Pedro Luso de Carvalho dijo...

Olá, amiga Franziska, gostei imensamente desse seu belo poema, um canto sobre a vida, uma metáfora sobre a vida advinda do vento e da árvore solitária e do tempo. Portanto um poema sobre a vida de
todos nós que habitamos esse planeta.
Bravo, minha amiga!
Uma ótima semana com muita saúde e paz.
Abraços

Tais Luso de Carvalho dijo...

Franziska, minha querida, quanta sensibilidade nessa cartinha para uma árvore, um ser que habita o mesmo mundo que nós habitamos, que nos dá sombra, proteção, beleza, moradia para vários animais! Não imagino um mundo sem árvores, sem flores belíssimas.
Eu penso que as árvores não são solitárias, nem as flores, elas conversam, espraiam suas raízes, trocam seus perfumes, não acredito que a natureza, tão bela e majestosa possa ficar na solidão se são tão rodeada de pássaros, de flores, do sol, da chuva...
Belíssima sua postagem, querida Franziska!
Desejo a você uma feliz semana, com muita saúde e paz.
Beijinho, adorei ver você no meu espaço.

Maite Sánchez-volarela dijo...

Querida Franciska. Tarde me doy cuenta de esta preciosidad de canto a tu árbol. Es muy entrañable, se queda dulcemente en la memoria. Comprendo ese amor que tienes a los árboles, ellos son tan parecidos a nosotros.... Son adorables.
Y la exposición floral es de primera. No sé cúal es más bonita, si las dalias, la orquídea, la margarita africana... ¡DIVINAS! Enhorabuena, maestra :)
Mi abrazo cálido para esta primavera. Que la disfrutes mucho!!. :))

Marina Filgueira dijo...

¡Holaa, Franziska!

Es una exquisitez esta Oda para el árbol de la vida, nosotros somos árboles, también echamos raíces, nos tambaleamos cuando nos acosa alguna tormenta... Algunas veces también nos doblamos y sentimos la misma soledad, también nos caen las hojas en cierto modo... Me encanta lo que has escrito y no tengo palabras para expresar la belleza de esta entrada que para mí es nueva, no recuerdo habértela leído.
Y bueno, las flores no sé cual escoger, pues todas son un encanto para los sentidos y en olfato.
¡En definitiva es un gran poema y un trajo de diez!

Gracias por compartir este gran post.
Te dejo mi inmensa gratitud y mi gran estima.
Un abrazo y se muy, muy feliz cada día que amanece.

Kasioles dijo...

Querida amiga: Y aunque esta preciosa epistola vaya dirigida a un árbol, no por eso deja de tener menos encanto.
Alrededor de mi huerto, tengo árboles de más de cincuenta años, desde que el jardinero no está, se han ido deteriorando, pero siguen ahí, a veces hasta sin agua, sus raíces aprendieron a buscarla porque ya nadie se acordaba de dársela.
Los árboles son un ejemplo de lucha, de supervivencia y de un volver a nacer en cada primavera que de alguna forma nos muestra la grandeza de Dios.
Y antes de que se me olvide, te animo a que hagas ese bizcocho, no presenta ningún problema, todo lo que hace Kasioles sale perfecto, confieso que no soy repostera, me defiendo mejor haciendo comidas saladas y para eso tengo más paciencia.
Te dejo un fuerte abrazo y ya no sé si te he dicho que me ha encantado el poema.
Kasioles

SÓLO EL AMOR ES REAL dijo...

Primero que todo celebro con el corazón tu regreso al blog mi querida amiga... Sobre tus letras de hoy te felicito por tan hermoso poema... hace falta un lindo corazón para escribirlo

Paz

Isaac