lunes, 13 de febrero de 2023

A L C A L Á DE H E N A R E S

 

 

La vida, el camino, la ribera, los cortados.

Tú, el frío,  palomas y   campanarios.

Alcalá como una cigüeña reflejada sobre el río.

 


La catedral, las noches, los silencios.

El aire del domingo. Cervantes, su pensamiento.

La Universidad,    romanos, árabes y hebreos

 nos legaron su cultura y memoria.

 


Sancho y las riendas de Rucio.

Su escudo, su herrumbre, su leyenda,

En las calles  se escuchan sus refranes.

 


Dulcinea, ajena al amor que despertaba,

tuvo una vida de mujer que no encontraba

gozo, amor, sosiego, paz ni esperanza.

 


Quijote, nuestro héroe loco y transparente

no morirá ante la indiferencia de la gente.

Predestinado o casual su nacimiento,

 es el más limpio orgullo de Alcalá.

 


Don Alonso Quijano, 

hijo de la ficción y del ingenio

está vivo y nunca, 

por más que algunos lo pretendan,

acabará su vida en la disputa 

de ser o no,  eternidad.

 

 


Alcalá de Henares, 13 de febrero de 2023

Texto y fotografías realizados por Franziska. La primera foto es de nuestro río Henares y, el resto de las fotos, fueron tomadas desde el campanario de la Catedral de Los Santos Niños.  Es una ciudad monumental y serían necesarias una gran cantidad de fotos.


 

domingo, 29 de enero de 2023

Besos

 


Besos que fueron rosario:

silabario de mis sentidas canciones.

Besos que fueron placeres.

Besos que nunca busqué.

Besos que siempre añoré.

 


Besos blancos, besos castos,

besicos de amor de madre…

 


Besos que fueron glosario

de deseos, de ternuras infinitas…

Besos que, en mi recuerdo,

nunca se han marchitado.

 


Que resuenan en mi mente

como un cuenco tibetano.

 


El beso tuvo un valor.

Los besos se racionaban

pero sabían a gloria

cuando alguien te los daba.

 


Alcalá de Henares, 29 de enero de 2023

Texto y fotografías realizados por Franziska

Escrito con fecha 7 de junio de 2012, como tema sugerido en el tertulia de los jueves en“La hospedería La Tercia

 


lunes, 16 de enero de 2023

LA CERRADURA

 



En el portón viejo

de la casa del cura

-apenas se vislumbra-

aparece cubierta de un moho

azul violáceo,

hay una antigua cerradura

que desea huir

hacia el incierto futuro del azar.

 



No tiene sentido.

¿Para qué vale estar en una puerta

que nunca se abre ni se cierra?

 


Un hábil artesano

-de manos prodigiosas-

ensambló su corazón de hierro,

aún no oxidado.

 


Allá, en el remoto pasado de las brumas

alguien rompió o perdió la única llave

y desde entonces, ella

escucha en las tormentas, impotente,

el chirriar de los goznes,

al llanto agónico del umbral,

el angustioso lamento de los herrajes

y el quejido amargo

del que fue bruñido llamador.

 


Su corazón fatigado no soporta

tanto dolor y sufrimiento inútiles

porque tiene ahora la certeza

-han sido ya demasiados inviernos y asperezas-

 será imposible escapar

antes de que tal puerta se derrumbe.



Alcalá de Henares, 16 de Enero de 2023

Texto e imágenes realizadas por Franziska

jueves, 12 de enero de 2023

allí donde la noche se ciñe sobre el mundo,

 

 


El dios que realizó la palabra y la flor

en sus fogones crea los vientos

que luego clamarán en el páramo

oscuro y confuso de los sueños.

 


El viento enamorado de la luna

al pasar por la laguna blanca,

musitará palabras tan confusas

que los árboles no podrán comprender.

 


Será entonces, cuando

desde la hondura del silencio,

acudirá un grito a mi garganta

que, rota en llanto abierto,

no podré contener.

 


Allí donde el trigal agita sus melenas,

allí donde la noche
se ciñe sobre el mundo,

allí volverá a renacer la luz  del día.

 

Recobraré el sonido de


tu risa

y, en mi deshabitado corazón

caminaré  contigo y tu recuerdo:

mi hombro junto al tuyo,

tu voz junto a mi  oído, tus ojos en los míos.

 

 


 Alcalá de Henares, 12 de enero de 2023

El texto se publicó en 13/07/2012 bajo el seudónimo de Ráitán.

Las fotos se realizaron en el Aeropuerto de Cuatro Vientos, de Madrid, durante maniobras de exhibición y son de Franziska. 


miércoles, 14 de diciembre de 2022

Ahora que tengo mucho tiempo

 


Cuando vivía tan intensamente

pensaba muy despacio o casi nada.

Ahora que tengo mucho tiempo,

mi vida transcurre poco a poco:

se nutre más


de  una clara fantasía

que de la realidad del vivir de cada día.

 


 Cuando tienes un hijo entre tus brazos

de tal modo tu corazón está ocupado

que te olvidas de ti, tus anhelos apartas

y hasta, de un modo imperceptible, dejas de existir.

En el inventario de esos años,

únicamente pasaron al haber

 

la dicha de los años vividos para él.

 

 


¡Descubrir la semilla que hemos sido

en la pujanza de esa vida que florece

abriéndose a la maravilla de la mirada,

la risa, el llanto, la primeras palabras.

Las manos anhelantes, el paso erguido,

la carrera alocada de un bebé…!

 

Las primeras preguntas y todos sus ¿por qué?

 


Lo que nos hace esencialmente humanos 

es ese amor que recibimos y que damos.

Que no hay vida completa, realizada,

en el corazón de quien no ha estrechado,

con ternura, un hijo entre sus brazos.

 

Alcalá de Henares, 14 de Diciembre de 2022

Texto y fotografías realizadas por Franziska

Se publicó el poema, bajo mi seudónimo de RAITAN, con fecha 17/06/2013


miércoles, 23 de noviembre de 2022

VIVO EN UN JARDIN TIBETANO

 


Vivo en un jardín tibetano

donde se despierta abril

y aún no ha llegado marzo.

 


Donde el tiempo se ha varado

en un remanso del rio,

a la orilla de un prado.

 


Vivo tan lejos de ti

que mi corazón se agita,

se expande y se encabrita.

 


Son tambores sus latidos

llamando a tu corazón

que parece estar dormido.

 


Vivo tan dentro de mí

que no recuerdo tu nombre

pero sueño con  tu voz.

 




Aunque no se mueva el viento

todo vive en mi jardín tibetano.

Florecerán las semillas

 

y yo, volveré a soñar, a reír y a cantar.

 


Alcalá de Henares,  24 de Noviembre de 2022

JUEGO DE LA PALABRA DADA

PALABRA: JARDÍN

DADORA:  MERCEDES SANTORCAZ

viernes, 4 de noviembre de 2022

El manantial

 


Una viajera avanza. Se dirige hacia la gruta. El viento, a veces, gime. Se desliza en el bosque un rumor que clama al cielo…de hojas atolondradas. Se han tronchado algunas ramas. El monte guarda silencio.  El río ahoga sus lágrimas.

 Pisa la tierra compacta que duerme siglos de tedio. Sus pisadas resuenan como un día de tormenta. Ajena al miedo que siembra y al rumor que la acompaña, la viajera se siente feliz con este proyecto. Soledad, paz y silencio es todo lo que añora su alma.



 Después de un verano atroz, el manantial languidece. Está el poderoso río casi extenuado y maltrecho. Los cantos del cauce son testigos mudos del exilio que  todos los peces han tenido que afrontar.

 La gruta está muy cerca del agua. Puede estar habitada. Se sienta a descansar del largo camino hecho. Enseguida, los sonidos silenciados reaparecen, es el grito placentero de criaturas que se arrastran, trepan, saltan, se zambullen, vuelan, observan y cazan.

 Es un asombroso mundo que recupera la calma.

 


Decían los campesinos que, al despuntar el alba, la doncella del manantial, como todos la llamaban, cantaba y que su voz era como un tañido de campanas. Escuchar su canto  sanaba todas las dudas del alma.

 Entonces, en la vida de las gentes, no existía el calendario

y el tiempo, no se contaba por años. El manantial  nunca se volvió a secar, por eso alguien dedujo que la moza era, en realidad, la diosa Minerva madre de la sabiduría y ¡cómo no, de la guerra! ¡Qué manía con las guerras!.

A día de hoy, y que yo sepa, nadie pidió su opinión. Sabios y poderosos, ya se sabe, otorgan honores: no siempre, razones.

 Esta es la historia sencilla del manantial que limita al norte, con la serranía de Cuenca y al sureste, con el complejo industrial que hay en Torrelodones.  ¿Que no hay complejo industrial? Lo dije por no dar pistas a las embotelladoras del ramo.

 Lo juro. Jamás, por mi, se sabrá donde está el manantial.



 La doncella de esta historia

aborrecía la presencia de las gentes.

¿Qué la llevó a tal trastorno?

Caminaba descalza. Seguramente, desnuda.

No cazaba animales. Se alimentaba de yerbas.

 Cantaba, sí. No tenía otra manera de hablar.

Algún invierno muy frío, se la llevó para siempre.

Aquella fugitiva jamás pudo imaginar

que, con el paso del tiempo, su tragedia personal

la conduciría a los altares de esa Roma imperial.

 


 Alcalá de Henares. 4 de noviembre de 2022

Texto e imágenes realizados por Franziska.  Las fotografías se dispararon en el desfiladero de La Yecla, en Burgos.

Se publicó por primera vez en "El juego de la palabra dada". La palabra que me dió Virgi, fue manantial. El día 3/08/2016