En
nuestra tertulia de “La tercia”
todos los
jueves, más o menos, a las nueve,
nos
reunimos los incondicionales.
De la
poesía, más que amigos,
casi
amantes del verso libre
o de las
rimas asonantes o consonantes.
Cada uno
comparte con los otros
llamémosle
su locura de poeta,
que todo
lo disfraza de hermosura.
En pocas
ocasiones
a la
realidad hace justicia
pues,
para ese trabajo, ya está la prosa.
Las
emociones más dramáticas,
para
expresar un mundo real o imaginario,
fluyen de
esta imaginación de visionario
más dado
a la fantasía que a aceptar
de buen
grado, la cruda realidad de cada día.
Así, describimos
de mil modos
la
tristeza, la ira o el enojo.
Del amor
sentido y no correspondido:
izamos la
quimera del yo jamás olvido
porque
del otro hay poco que contar:
sólo unos
cuantos han logrado
ese amor
único y maravilloso.
Andamos
como seres desterrados
aferrados
al recuerdo más nimio
justificando
que, siquiera
por un
tiempo efímero,
aquél a
quien amamos todavía
en algún
instante lo vivió con nosotros
o quizás,
llegó a correspondernos…
Porque es
tal la hondura que nos hiere
que
confundimos el cuerpo con el alma.
Mientras
aquél ya no soporta tal combate,
nosotros
nos aferramos al dislate
de
sostener que sólo somos sentimiento.
¿Por qué
hemos de negarlo?
A veces,
es tan hermoso el sufrimiento.
Nos hace
sentir vivos, generosos
y olvidar
nuestra dicha por hallar la del otro.
Alcalá de Henares, 6 de septiembre de 2022
Texto y fotos creativas de Franziska
Corresponde a un JUEGO DE LA PALABRA DADA, publicado con fecha 4/04/2012. La palabra sugerida por José Manuel Auñón Henares, fue INCONDICIONALES